La talentosa Demi Moore recibió su primer gran premio de actuación al ganar como Mejor Actriz en una Película Musical o de Comedia, sorprendiendo a la audiencia y dejando atrás a favoritas como Karla Sofía Gascón y Cynthia Erivo. En su discurso, la actriz reflexionó sobre los desafíos de su carrera y el impacto transformador de este papel.
En una de las mayores sorpresas de la noche, Demi Moore se alzó con el Globo de Oro a Mejor Actriz en una Película Musical o de Comedia por su interpretación en el thriller de terror corporal “La Sustancia”. Este reconocimiento marca un momento clave en la trayectoria de Moore, quien, a pesar de ser una de las figuras más emblemáticas de Hollywood, nunca había recibido un galardón de esta magnitud.
La actriz compitió en una categoría reñida junto a Karla Sofía Gascón (Emilia Pérez) y Cynthia Erivo (Wicked), quienes partían como favoritas. Sin embargo, la impactante actuación de Moore en “La Sustancia” logró conquistar al jurado, consolidando su regreso a la cima del cine.
En un emotivo discurso de aceptación, Moore recordó los obstáculos que enfrentó a lo largo de su carrera, incluyendo críticas que la etiquetaban como una “actriz de películas comerciales”. “Hice que eso significara que no era digna de reconocimiento”, confesó. “Esa mentalidad me desgastó al punto de creer que mi carrera había terminado”.
El guion de “La Sustancia” marcó un punto de inflexión en su vida profesional. “Este guion audaz, valiente y absolutamente loco llegó cuando pensé que mi camino en el cine había terminado. Fue un recordatorio de que todavía tengo historias por contar”, expresó Moore, visiblemente emocionada.
Con este premio, Moore no solo reivindica su talento, sino que también inspira a otras actrices a desafiar las etiquetas y buscar proyectos que rompan moldes. “La Sustancia”, dirigida por Coralie Fargeat, promete convertirse en un referente dentro del género de terror contemporáneo y en la posible máxima ganadora en la temporada de premios.